Pedí pisco sour sin huevo, que el garzón ofreció; llegó con huevo. Pedimos cambio de un plato con un largo pelo, llegó el mismo plato sin el pelo. Se esperaría una mejor atención. Buenos platos aparte
Se nota que todo el amor al arte ya desapareció de este lugar. Mi pescado no tenía nada de fresco. La iluminación verde es terrible y la decoración peor. Ademas el olor a parafina es insoportable.
Pésimo. Olvidaron nuestro pedido, no hubo disculpas, un plato llegó frío, las preparaciones son chamuyentas, resultó caro y no entiendes qué concepto de este tipo de comida tiene la gente que asiste.