Por favor avísenos cuando pidan un plato vegano; la preparación es distinta. No se usa mantequilla, eliminamos los aderezos y empanizamos con agua y aceite.
El Pamela Anderson y Rubén Albarrán están ok, aunque el segundo llegó frío. El croque madame decepciona y las guarniciones que mencionan en la carta las cambian sin avisar. El café es rescatable.
Lo impresionante no es que se atrevan a vender un VASO CON AGUA en $40, sino que yo lo haya pagado. Alimentos bien, a secas y, francamente, toda su carta tiene un sobreprecio del 25%. Nada especial.
No lo recomiendo, fui y tuve una mala experiencia, mi comida llegó con un pelo y me dio muchísimo asco, el mesero ni se disculpó y sólo me dijo que lo iba a cambiar. Medio a regañadientes lo comí.
Antes la Sabina súper Rica ahora cambió el sabor el distinto y las cebollitas no están tan buenas, apuntaron mi nombre mal y luego no querían darme mesa y es leeento el servicio. Fallaron