Aquí vas a encontrar puros caldos, en dos presentaciones. Recomiendo el de hongos, con chile poblano, se acompañan con tortillas hechas a mano y una agua fresca o café de olla. Solo aceptan efectivo.
Excelente lugar la comida deliciosa con un ambiente muy cultural, un espacio diferente donde se conjunta comida y arte, la creadora del concepto es alguien muy amable y lindisima, me encanto, 😍😍😍
El puchero y el mole de olla están deliciosos. Acompáñalos con un agua de Jamaica y un té de limón. Para terminar en la misma área te venden unos duraznos en almíbar hechos en casa.
Muy buen lugar tranquilo y rico para comer un buen caldo yo probé el caldo tlalpeño y muy bueno con el picante justo para que tenga sabor pero sin llegar a enchilar y la atención excelente
El Lugar es Frio, sin identidad, falta Capacitacion Para brindar servicio, en cuanto a Los alimentos, el mole de olla es bueno, en otra ocacion probare el puchero, vale la Pena.
Desafortunadamente muy mal administrado. Nunca tienen todos los caldos que ofrecen. Abren tardísimo y ya abierto te dicen que se está cosiendo X caldo y que van a tardar 2 horas y el de pollo en 40min
Antes estaba bien pero el servicio ya decayó muchísimo. Abren tarde y nunca tiene listos los caldos, atienden mal a pesar de que la dueña anda por ahí cerca platicando con sus amigos. Es una lastima
Recomiendan mucho el lugar pero no tiene un buen servicio, tardaron media hora en darme mesa y llevo otra media hora esperando mi pedido, no es un buen lugar si vas con gente mayor.
Pésimo servicio, el negocio según es vender caldos y no tienen ninguno preparado. Las mesas sucias y no hay meseros, tienes que pedir a las cocineras que te atiendan. Nada recomendable
La calidad de los alimentos es muy baja, la verdura ya está casi pasada el servicio es lento y el sabor del mole de olla es muy malo exceso de especias
Lo único medio salvable es el té frío de limón y eso a medias porque está dulce. Los caldos están todos mal hechos y sin sabor. No vayan solo es perder tiempo y dinero.