La terraza Atenas es un must del verano en Madrid. Remoja tus pies mientras te tomas un cocktail. Se está agusto aunque los precios son algo exagerados, cosa del postureo que asoma a ciertas horas.
Postureo a tutiplén. El lugar como tal es estupendo, pero ese despliegue exhibicionista y esnob, junto al chunda chunda del dj hacen que no huyas de inmediato solo para amortizar la clavada.
No conocía esta terraza y se ha convertido en una de mis favoritas, te traslada a otro lugar. Los mojitos riquísimos, pero podrían bajar un poco el precio de las copas...
Antes molaba mucho cuando era más tranquila. Ahora van de guay y se han convertido en antipáticos, música altísima y ridículamente hay sofás en los que sólo te puedes sentar si pides una botella.Pfff!