Un lugar precioso y acogedor. Muy bien decorado y con mucho estilo. La tarta de Dulce de Leche espectacular. Los tés con una empanada chilena sublime.Por cierto a mi me atendieron muy bien.
Excepcional tarde de merienda en Margó. Scones acompañados de su cremita inglesa y un Rooibos de frutos rojos, sitio con encanto , las camareras muy agradables, totalmente recomendable!!!!
Caro como todos estos salones de te. Red velvet muy rica. Con mucho encanto aunque me ha llamado la atención lo descuidada que estaba la zona de venta de artículos.